La vuelta al cole (o escuela infantil) y el periodo de adaptación

Desde Mi 1ER Cole queremos dar a los padres algunos consejos para que el inicio del curso escolar y/ o la vuelta al cole sea una experiencia positiva tanto para los niños, como para los padres.

Esperamos que os sean de utilidad estos cinco tips esenciales:

 

1. Hablar de la escuela como algo divertido y positivo

Días antes de empezar la escuela podemos ir hablando a nuestros hijos sobre la escuela y lo bien que se lo van a pasar, cómo van a disfrutar, lo genial que será estar con sus compañeros y profesores, etc…

Algunas de las frases que podemos utilizar para motivar a nuestros hijos son: «cuando empieces el cole vas a jugar un montón, «vas a aprender cosas muy chulas o «vas a hacer muchos amigos nuevos». Los niños a partir de dos años ya entienden esos mensajes y los interiorizan. De este modo, la experiencia del cole se presenta como una experiencia positiva y los niños preparan su vuelta al cole (o su inicio de la actividad escolar) como una aventura motivadora.

 

2. Enseñarles la escuela antes de empezar

La escuela será para los niños como un segundo hogar, pasarán mucho tiempo dentro de ella, en sus instalaciones y con los profes asignados. Lo más natural es que antes de empezar los niños ya estén familiarizados con el entorno y con las personas que les van a acompañar. Por lo tanto resulta muy aconsejable que antes de empezar el cole, acudas con tu hijo/s al centro escolar y les enseñes el lugar, siempre remarcando lo divertido que va a a ser estar allí, lo mucho que van a jugar y cuánto van a aprender. Es importante que conozcan también a sus futuros educadores y que les expliques que ellos serán los profes con los que jugarán y se divertirán. Por parte de los educadores también será importante que entren en contacto físico con los niños, que los aúpen o que los lleven de la mano por el cole, para que el niño sienta la cercanía y la confianza que necesita para sentirse seguro.

 

3. Implicar a tus hijos en la vuelta al cole

Los niños tienen que ser partícipes de la experiencia. Es muy recomendable que días antes de empezar el curso tengan sus mochilas (sería muy bueno que ellos seleccionaran su mochila favorita) y preparen el material que van a necesitan durante el curso. En el caso de los más pequeños, pueden introducir los baberos o los vasitos en las mochilas, probarse los babis, etc. Los más mayores pueden llenar su mochila con las libretas o los lapiceros. El día que empiece el cole, ellos deberían llevar puesta su mochila y, de camino a las escuela, los padres deberían enviar mensajes positivos de refuerzo tipo “ Qué bien! Hoy empieza el cole!” “¿Estás contento? Hoy empieza la escuela,vas a jugar un montón!”

 

4. No hacer drama en la despedida

Muchas veces la preocupación de los padres es mayor a la de los niños. Cuando dejemos a nuestros hijos en la escuela debemos despedirnos rápido, nuevamente, con una frase de ánimo: “Te lo vas a pasar superbien! Luego vuelve mamá!”, un beso y adiós. Estas despedidas no deben alargarse. Aunque nos rompa el corazón dejarlo o nuestro hijo se quede llorando, debemos asumir que se trata de una reacción normal y que en sólo unos minutos nuestro hijo se encontrará jugando y riendo con el resto de los compañeros. Sabemos que el vínculo madre/padre/hijo es muy fuerte pero nuestros niños también deben aprender a ser autónomos y a vivir -a ratitos- sin nosotros. Eso será bueno para el desarrollo del niño y le ayudará a relacionarse y a ser autosuficiente, es parte del aprendizaje necesario en la vida.

 

5. Nunca hablar de la escuela como algo negativo

Muchas veces los padres utilizan la escuela como objeto de castigo y este es un error muy grave. Los niños tienen que interiorizar que la escuela es algo bueno y divertido. No podemos decir a nuestros hijos frases como: “Si te portas mal te voy a llevar al cole” o “Como hagas esto se lo voy a contar a tu señorita y verás mañana!”.
Si nuestros hijos desobedecen o tienen malas conductas debemos utilizar, en primer lugar argumentos comprensibles para ellos (“No hagas esto porque te puedes hacer daño”, “Si empujas al nene se cae y se hace pupa”, “Si tiras esto al suelo se rompe y ya no sirve”…) y en segundo lugar podemos emplear el castigo razonable sin mostrarnos demasiado alterados: “Como sigues sin obedecer ahora tienes que estar castigado 2 minutos cara a la pared”, por ejemplo.

 

Esperamos que todos estos consejos sean de utilidad para los padres. Aunque si necesitáis un asesoramiento personalizado podéis pedir cita en nuestro gabinete psicopedagógico y os informaremos mejor.

¡Feliz vuelta al cole!

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